Obras cumbres

Los tiempos pasan y las obras quedan, nadie recuerda bein quien era el rey de inglaterra cuando Shakespeare pensaba en Hamlet, porquien o poruqe batallaba Cervantes antes de escribir el quijote, si apoyó o no Napoleón ludwing Van Beethoben, las preferencias sexuales de Amadeus Mozart, como firmaba las cartas a su hermano Vicent Van Gogh, si Carlos Gardelera conservador o radical, el verdadero nombre de la chica que inspiro a Spinetta Muchacha ojos de papel. el enorme Atahualpa Yupanqui pensó alguna ves que el mejor destino de sus canciones era convertirse en anónimas, que la gente cantase, como en efecto canata el arriero, sin saber siquiera cual es el nombre del autor...
S.N.M

Son parte del barrio


Buscando en los cajones encuentro partituras de canciones que no entiendo, olvido leer los silencios, olvido escucharlos y eso me hace mal.
Tengo que confesarlo, llegamos a un momento en el que el cuerpo no aguanta tantas heridas, cuando dios te da un don, tambien te da un latigo, y ese latigo es solo para autoflagelarce; tengo tres heridas, la del amor, la de la muerte la de la vida,en este orden, aunque debo decir que he contribuido en las heridas de los demas, y no precisamente para bien...
La del amor, porque el amor parece ser tan perfecto, inalcanzable, infinito, paradiciaco que no está a mi alcance, pero que como se debe decir, cuando un hombre y una mujer se unen y crean a un semejante, ahi esta el amor... una energia tan grande que puede mas que la propia muerte y que para diferenciarla de cualquiera no se refiere al sexo, sino a la muerte.
La de la muerte, porque para mi la muerte esta en prioridad ante la vida, y para que exista algo en este universo, sin asegurar que si se halle, solo existe una condicion, que concurra en su contrario, el bien y el mal, el blanco y el negro, la luz y la oscuridad, de otro modo las cosas no se hallan en esta galaxia; la muerte duele tanto como el amor, la muerte es una ausencia tan grande que crea una entidad entre las arterias, la muerte no es mas que verme al espejo y ver mi rostro parecido al de Él, no es mas que ver el azul de sus ojos y sentir un arduo pasaje recorrido hacia escuchar el retumbo de las tripas por el sufrir para sonreir, o mejor para verme sonreir... para verme vivir.
La de la vida, porque al fin y al cabo es lo unico que tengo, los mejores placeres son gratuitos, orinar, defecar, respirar, estornudar, el amor, la vida, la muerte, llorar, dormir... todo es gratis, todo tiene un costo, facil o dificil de pagar de esto se trata, de llorar y sonreir al mismo tiempo y de frotarse las manos una contra otra sin que nadie cobre el hacerlo, y escuchar la musica de mi cabeza cada ves que se me antoje... si eso no es la vida entonces que es...

Tengo una herida, si mis tres heridas concurren en ser la misma al fin y al cabo entonces de que me preocupo, si de la muerte sale la vida, si la muerte es el amor y la vida... tengo la herida mas corrociva para el alma, hacer que cicatrice es tan dificil como sucidarme sin morir y poder respirar de nuevo para valorarlo todo como se merece...

Ahora debo apuntar que en mi libro de partituras y en los diccionarios no he encontrado la palabra, el nombre de mi herida, pero como la herida es tambien todo lo que soy, la palabra no está ausente...

Tengo una herida, la de la vida, la del amor, la de la muerte, en este orden Siu
Esta ves, Siu dos veces

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